Lo que dicen diversos autores sobre este género directamente emparentado con la entrevista de personalidad
Alex Grijelmo divide de entrada este género y habla de reportaje-perfil y entrevista-perfil, haciendo la salvedad de que en el primer caso no se necesita hablar con el protagonista aunque, advierte, siempre conviene incluir frases del personaje en cuestión. Balsebre, Mateu y Vidal en La entrevista en radio, televisión y prensa hablan de retrato biográfico, asociándolo al tipo de trabajos que se hace en revistas americanas como Vanity Fair.
Aunque Miguel Ángel Bastenier lo considera «primo de la crónica», el perfil es para muchos autores una forma de entrevista. Sin duda hijo aventajado de ella, constituye la tesis dibujada de un personaje de actualidad −no una caricatura− y en algunos casos funciona como metáfora de una realidad, de una tendencia, de un periodo histórico determinado. El peruano Julio Villanueva Chang, editor de la revista Etiqueta Negra, habla de intento de retrato explicativo «más o menos completo de la vida y el carácter de una persona» y a continuación advierte que también puede limitarse al drama de alguien en una determinada situación de su vida.
El perfil es una historia. Un pedazo de historia, mejor dicho. Un pedazo de historia personal con interés colectivo que no olvida nunca que la vida tiene bastante de sublime y ciertas dosis de absurdo, cosas que suelen venir mezcladas aunque no se note a primera vista.